Os traemos nuestras impresiones tras haber estado utilizando el Galaxy Z Flip 3, el mejor plegable que ha hecho Samsung hasta la fecha.
Soy un amante de la tecnología desde que tengo uso de razón, y siempre he tenido el gusanillo de tener en mi propiedad lo más nuevo y novedoso. Esto también me ha ocurrido siempre con los smartphone, y a día de hoy hablar de “novedoso” en este mundo es hacerlo, sin duda alguna, de los plegables de Samsung.
Si nos sigues habitualmente sabes que siempre estamos hablando de las virtudes de los nuevos Galaxy Z Flip 3 y Galaxy Z Fold 3, y gracias a Samsung hemos tenido la oportunidad de estar varias semanas probando a fondo el primero de ellos.
Dejando a un lado el Fold, que quizás busca ofrecer un híbrido de móvil y tablet plegable, el Galaxy Z Flip 3 no deja de ser un smartphone al uso, con la gran diferencia obviamente del sistema plegable. Samsung ha querido seguir ahondando en una tecnología que es de lo más prometedora, y por ello ha lanzado al mercado un plegable que mejora en todo a su predecesor. Pese a la mejora, ¿merecerá la pena? Pues sin enrollarme mucho vamos a verlo.
https://youtu.be/chLqCRr7eN0
Especificaciones técnicas del Galaxy Z Flip 3
Dimensiones | 72,2 x 86,4 x 17,1 mm (plegado) 72,2 x 166 x 6,9 mm (desplegado) |
Peso | 183 gramos |
Pantalla Interior | Dynamic AMOLED 2X Infinity Flex Display de 6,7 pulgadas Full HD+ (2640 x 1080 puntos), 425 ppp y 120 Hz |
Pantalla Exterior | Super AMOLED de 1,9 pulgadas (260 x 512 puntos) y 302 ppp |
Procesador | Snapdragon 888 5G |
Resistencia IP | IPX8 |
Batería | 3.300 mAh con Carga Rápida de 15W |
Cámaras | Frontal: 10 megapíxeles, f/2.4
Trasera: Principal de 12 megapíxeles, Dual Pixel AF y Ultra Gran Angular de 12 megapíxeles, f/2.2. |
Precio | Desde 1.059 euros (128/8GB) |
El diseño es la mejor baza del Galaxy Z Flip 3
Lo que voy a decir ahora mismo es imposible que pille a alguien por sorpresa: casi el 100% de personas que se compren este Galaxy Z Flip 3 lo harán por su diseño plegable. La idea o concepto de este tipo de Z es simplemente el tener un móvil que se puede plegar como si fuera una polvera, lo que nos permite tener un smartphone con una pantalla de muy buenas dimensiones pero que ocupa muy poco espacio y que podremos guardarnos en cualquier tipo de bolsillo.
Samsung ha cogido el mismo diseño del Z Flip original y lo ha mejorado en prácticamente cualquier aspecto. Su estructura es de aluminio y vidrio, con un acabo brillante que le sienta como un guante y que es realmente bonito a la vista. El aluminio utilizado por la compañía coreana para su fabricación recibe el nombre de “Armor Aluminium”, que sobre el papel sería muchísimo más resistente que el utilizado en otros móviles y que le daría una mayor dureza a este Flip 3.
A este “Super Aluminio” debemos sumarle el llamado Gorilla Glass Victus, un vidrio muy resistente que recubre las dos mitades del Z Flip y la pantalla que tenemos en el exterior del teléfono. Los cristales de esta marca se caracterizan por ser increíblemente resistentes tanto a golpes como a arañazos, especialmente a estos últimos. He utilizado el móvil varias semanas sin ningún tipo de fundas y el Galaxy Z Flip 3 está exactamente como lo saque de la caja.
La estructura y la pantalla de este Galaxy Z Flip 3 han mejorado notablemente con respecto a su predecesor.
La pantalla interna está fabricada con el llamado vidrio ultra delgado (o Ultra Thin Glass) que permite que la pantalla tenga una gran flexibilidad y permite su pliegue. Una de las grandes ventajas que tiene este nuevo Flip con respecto a su antecesor es que permite colocar y mantener en una posición fija ambas pantallas sin estar el móvil totalmente desplegado, lo que permite colocar el teléfono en una superficie plana abierto y utilizar su cámara frontal o incluso ver vídeos de Youtube en la parte de arriba. Toda una pasada.
Todas estas características están pensadas para que el teléfono sea mucho más resistente, pero pese a ello esta resistencia o dureza puede ser una de las mayores preocupaciones de cualquier consumidor que se quiera hacer con él, y yo mismo sentí un poco de “miedo” a la hora de abrir y cerrar el teléfono. Tanto la bisagra como la pantalla interior están diseñadas para ser utilizadas durante mucho tiempo, y de hecho el sistema tiene una suavidez bastante grande que incluso permite cerrarlo con una sola mano (para abrirlo es bastante probable que necesites las dos).
No puedo terminar de hablar de su diseño sin mencionar otro gran avance y que diferencia los plegables de Samsung del resto. El Galaxy Z Flip 3 tiene una protección IPX8, lo que quiere decir que es el primer de estos smartphone que es resistente al agua. Esto es un avance impresionante para este tipo de Galaxy Z, aunque por desgracia se echa en falta que no tenga el mismo nivel de protección contra el polvo.
Dos pantallas que darán mucho de que hablar
Pese a que ya hemos hablado de la construcción de ambas pantallas creo que es conveniente que ahondemos un poco más en sus características y como funcionan. La pantalla de dentro abierta es de 6,7 pulgadas, con formato 22:9 y resolución FullHD+. Se antoja un poco extraño que la compañía no haya querido implementar una que sea QHD, pero lo cierto es que impresiona lo bien que se ve. El verdadero salto en realidad lo encontramos en su tasa de refresco que es de 120 Hz (aunque no siempre).
Hablando de lo que es el uso en si, hay que tener en cuenta lo “raro” que es el pliegue de la pantalla, incluso cuando la pantalla está abierta completamente, pero al igual que ocurre con todo, no nos costará demasiado acostumbrarnos. El Galaxy Z Flip 3 viene con un modo intenso de colores activados, lo que hace que en pantalla se muestren colores muy vivos y con un contraste elevado (demasiado para mi gusto). Hay disponible un modo natural que, tal y como viene de serie, me parece mucho más natural.
Como digo, esta es de gran calidad como digo pero un escalón por debajo de la del Galaxy S21 que también pudimos probar hace poco. Además, no se si es por el pliegue o por el tipo de cristal la pantalla, pero lo cierto es que acumula demasiado las huellas por lo que a veces es molesto si no estamos limpiando la pantalla cada poco tiempo.
Por otro lado, la pantalla exterior me ha parecido perfecta. Samsung ha tomado una decisión de lo más inteligente al hacerla considerablemente más grande que en el Z Flip original, y es algo que se agradece. Esta, que era de 1,1 pulgadas se antojaba demasiado pequeña, y la que monta el Z Flip 3 (de 1,9) es ideal para todo lo que podemos hacer con ella (que no es poco). Es cierto que para usarla tendremos que tener el teléfono totalmente cerrado, pero con dos simples toques ya tendremos acceso a ella.
La mejora en la pantalla exterior es bastante más de lo que parece: ideal para (casi) todo.
Su funcionamiento es de lo más intuitivo: si deslizamos hacia la derecha podremos ver las notificaciones, que se agruparán de manera automática por aplicaciones. Al ser la pantalla más grande también es más fácil ver los mensajes, pero también podremos ver otras de todo tipo. El teléfono nos permitirá borrarlas, abrirlas o contestar mensajes, aunque para ello si que tendremos que abrir el teléfono. Lo bueno es que si seleccionamos la opción de responder podremos acceder automáticamente al mensaje de la notificación sin ni siquiera tener que abrir la app antes.
Si, por el contrario, decidimos deslizar hacia la izquierda tendremos acceso a los widgets. Como podéis ver en las imágenes de abajo (INSERTAR IMAGENES WIDGETS) podremos elegir cuales querremos que estén presentes en nuestro dispositivo. No solo esto, sino que además también tendremos la posibilidad de cambiar su estilo y poner cualquier imagen que queramos (no deja de ser una pantalla más). Por último si deslizamos hacia abajo tendremos acceso al brillo de la pantalla, al sonido y a cambiar si queremos tener el móvil en vibración o totalmente silenciado.
Me he dejado para el final lo que más me ha gustado de esta pantalla, y es la posibilidad de hacernos selfies sin abrir el teléfono. Con dar dos pulsaciones al botón de encendido se activará la pantalla y lo cierto es que hacernos fotos así es una auténtica delicia. Esta mejora de pantalla con respecto a la versión previa es espectacular, aunque aun tendría que tener un salto de calidad que nos permitiera contestar mensajes de alguna manera, por ejemplo.
Un rendimiento de auténtica alta gama
A nivel de rendimiento pocas pegas se le pueden poner al Galaxy Z Flip 3. El nuevo plegable de Samsung monta un procesador Snapdragon 888 con la posibilidad de elegir entre 8 y 12 GB de RAM, además de 128 o 256 GB de almacenamiento. Es importante elegir sabiamente la capacidad de nuestro almacenamiento ya que no dispondremos de ranura micro SD. Con todo esto tenemos un smartphone de alta gama, capaz de ejecutar por ejemplo cualquier juego puntero con la mejor de las calidades. A continuación os dejamos un pequeño clip de PUBG: New State:
Lo que más destaca del resto del hardware del Flip 3 lo encontraremos en unos altavoces estéreo que funcionan sorprendentemente bien y un sensor de huella presente en el botón lateral del teléfono (un sensor debajo de la pantalla no tendría mucho sentido aquí). Mientras que este último funciona bastante bien la verdad es que he tenido algún problema a la hora de desbloquear el teléfono con la cámara frontal por lo que al final opté por desbloquear el teléfono con la huella, que al menos en mi caso fue infalible.
Hablando ya de la experiencia de usuario a nivel de software debemos tener en cuenta que este Galaxy Z Flip 3 utiliza una versión especial de One UI 3.1, dedicada para plegables. Es cierto que encontramos cosas exclusivas que no podemos ver fuera de esta gama, pero parece que la mayoría de funciones propias están destinadas a su hermano mayor Fold. La que más resalta la hemos mencionado antes con la posibilidad de poder personalizar a nuestro gusto la pantalla exterior del teléfono, pero no es la única.
Gracias a algunas aplicaciones compatibles (sobre todo las de Google) o la posibilidad que nos brinda con “Labs” podremos utilizar la pantalla del teléfono como si fueran dos cuando lo tenemos semi-plegado. El ejemplo más claro lo veremos a la hora de ver un vídeo en Youtube por ejemplo, ya que el Galaxy Z Flip 3 nos permitirá poner el teléfono en ángulo de 90º de tal manera que este se mostrará en la parte superior y no necesitaremos ningún tipo de sujeción para él.
Una cámara que rinde mejor de lo esperado
Pensé que, pese a estar en un teléfono de gama alta, la cámara estaría bastante por debajo de otros Galaxy como el S21, pero para nada. Aquí encontramos una configuración de doble objetivo trasero más una cámara frontal en la parte interior del teléfono. En lo que respecta a la cámara principal, estos dos objetivos son de 12 megapíxeles, similar precisamente a lo que ya usa el Galaxy S21. Gracias a estos dos objetivos conseguiremos hacer unas fotos con una calidad notable en situaciones con una buena iluminación. Por desgracia esta calidad no se mantiene al mismo nivel con menos luz, aunque para nada se ven mal.
La cámara delantera por otro lado es de 10 megapíxeles y es capaz de captar un radio de visión de 80 grados. He probado a hacer videollamadas con el teléfono plegado encima de la mesa y dejadme deciros que el resultado es impresionante. Obviamente no recomendaría este teléfono para aquellos que busquen un smartphone con una muy buena cámara (para eso está el Galaxy S21 Ultra) pero sin duda es un aspecto que no desentona con el resto del terminal.
Su autonomía es su principal pega
Si nos ponemos a pensar en frío sobre un teléfono de estas características lo cierto es que es lógico pensar que sus desarrolladores tuvieron que hacer algún tipo de sacrificio para poder lograr el producto que ha llegado al mercado. El mayor de ellos lo tenemos en la batería, que no ha sufrido ningún tipo de evolución con respecto al Z Flip original. Esto en cifras se traduce en que este nuevo Flip monta una batería de 3.000 mAh, batería demasiado pequeña para un teléfono de gama alta como es este.
Con un uso normal (es decir, sin demasiado contenido multimedia, brillo normal y poco más) no debería de tener ningún problema en aguantar un día entero sin necesidad de cargarlo. El problema es que a lo poco que utilicemos más que esto el teléfono si que podríamos tener la necesidad de cargar el teléfono antes de 24 horas. Esto, que ya de por si podría sonar mal, empeora cuando vemos que la carga rápida que admite el Galaxy Z Flip 3 solo es de 15 W, cifra que se vuelve a antojar baja si tenemos en cuenta que estamos ante un móvil de más de 1.000 euros.
Conclusiones
Tenía muchísimas ganas de poder vivir la experiencia de tener en mis manos el Galaxy Z Flip 3. Creo que Samsung ha sido muy inteligente este 2021 y ha potenciado mucho una gama que puede ser perfectamente el futuro de los smartphone. Las cifras abalan claramente esta decisión, y es que la compañía esta batiendo récords incluso en un año donde la producción de teléfono se está viendo gravemente afectada por la escasez de chips.
Sin duda alguna es uno de los mejores smartphone de este 2021 y una de las estrellas del catálogo de Samsung.
El Galaxy Z Flip 3 puede parecer el mismo teléfono que el Flip original, pero nada más lejos de la realidad. Tanto en su estructura como en sus características podemos ver un salto de calidad notable que hace de este smartphone un producto mucho más redondo. Sin embargo no puedo decir que sea un producto perfecto, ya que creo que tiene algunas “carencias” que preocupan, especialmente en lo que respecta al tamaño de su batería. Pese a esto se trata de, en mi opinión, el mejor plegable de los que hay en el mercado, y pese a su precio elevado no creo que haya otro que merezca más la pena (con permiso del Galaxy Z Fold 3).