De esta manera, Samsung aporta su granito de arena para acercar un modelo de educación digital a zonas donde no tienen recursos.
No hay lugar en el mundo donde la actual pandemia de la COVID19 no haya hecho estragos, gente sin poder ver a sus seres queridos, puestos de trabajo perdidos y lo que es peor de todo, mucha gente perdiendo la vida. Pero hay lugares en el mundo que por su situación previa a la pandemia están en peores condiciones que el resto.
Uno de estos países es Kenia. Ya de por si es un país pobre, pero si además tenemos que contar con que el actual modelo educativo ha de pasar por su modelo mas digital, esto convierte la educación en este país en algo inalcanzable para cualquier ciudadano de a pie.
El modelo de educación digital al alcance de todos gracias a Samsung
Samsung se ha propuesto poner remedio a este gran problema, y es que ha donado 1000 Galaxy Tab a ACNUR, la agencia de las naciones unidas para los refugiados. ACNUR redistribuirá en Kenia estos dispositivos en centros educativos y escuelas para la interconexión de los alumnos en estos momentos tan complicados.
Dos de los campos de refugiados donde se redistribuirán las Galaxy TAB son los de Kakuma y Dadaab. Estos campos de refugiados son de los mas antiguos del mundo y actualmente cuentan con 380.000 refugiados de los cuales se estima que un 40% sean menores en edad escolar.
En enero de 2021 las escuelas de Kakuma y Dadaab reabrieron sus puertas, pero debido a la pandemia, (ya antes no les sobraba), van muy escasos de materiales escolares. Esta contribución por parte de Samsung ayudará a que los estudiantes puedan utilizar recursos digitales paliando en gran parte la escasez de material didáctico convencional.
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