Samsung está cerca de retomar su gama FE, su súper ventas de gama alta a precio razonable que vuelve este 2023 después de un año ausente.
Como cada vez que se acaba de diseñar un smartphone y se comienza a prepara su producción, los fabricantes van dejando pistas sobre qué podemos esperar. Así ha ocurrido con Samsung y el Galaxy S23 FE, de cuya batería hemos tenido noticias a través de una certificación.
Informa GSM Arena que los Galaxy S23 FE podrían presentarse durante el tercer trimestre del año 2023, pero irá dirigido a mercados muy concretos. Más tarde, durante el cuarto trimestre, estos mercados en los que el terminal de gama alta a buen precio de los coreanos esté disponible aumentarán, si bien no será hasta comienzos del año 2024 cuando la oferta del S23 FE sea global.
Los fans de Samsung esperan la vuelta de la gama FE como agua de mayo y no es para menos, siempre prometen altas prestaciones por un precio muy comedido
Este lanzamiento en escalas parece que se esté poniendo de moda en el mundo de la tecnología y no se sabe a ciencia cierta si responde a una cuestión de logística o de falta de materiales. Quizá, simplemente, se priorice otros productos en el mercado global.
En todo caso, se van conociendo detalles de los Galaxy S23 FE. Los terminales equiparán a nivel general, incluso en EE.UU., un chip Exynos, el Exynos 2200, con GPU de XClipse 920 de AMD. Es llamativo que, precisamente, el año que Samsung lanzó todos su terminales de la familia S23 con un chip de Qualcomm en todos los mercados, el hermano menor de la familia, precisamente, equipe uno de fabricación propia incluso en mercados donde históricamente Samsung optaba por el Snapdragon de turno. Sin duda esto obedece al abaratamiento el terminal, hace poco observamos como el coste de los chips de Qualcomm suponía un 35% del coste de los Galaxy S23 Ultra.
Otras especificaciones del Galaxy S23 FE serían su lente de 50 Megapíxeles, sus altavoces mejorados, y una batería de 4.500 Mha con 25w de carga rápida. Si consigue mantener el precio ajustado, puede ser el caramelito tecnológico de finales de año.