Parece cada día más claro que el futuro de la telefonía móvil pasa por la IA.
El pasado día 17 Samsung puso sobre la mesa su serie S para este año, los tres modelos llamados a reinar en la gama alta premium de Android, los Galaxy S24, Galaxy S24+ y S24 Ultra.
La gran novedad de estos dispositivos no era tanto un nuevo diseño rompedor o un sistema de cámaras renovados, porque no fue así, sino que el argumento de fuerza de esta generación es la IA integrada en el sistema, Galaxy IA.
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Gracias a esta Galaxy IA vimos como los S24 eran capaces de hacer virguerías. Lo traía junto con Google, una colaboración que viene de largo y que permite a los Galaxy S24 incluir en los dispositivos una serie de funciones súper útiles y únicas, o al menos hasta ahora.
Al menos hasta ahora ya que, una de las funciones principales de la Galaxy IA, el Magical Circle, que permite redondear una imagen o un elemento de la imagen y la IA lo reconoce y te dice qué es o dónde comprar, ahora aterriza también en los teléfonos propios de Google, los Pixel 8 y Pixel 8 Pro.
Al fin y al cabo, Galaxy IA viene gracias a Google, tanto es así que para ejecutarse usará los servidores de la gran G, siendo normal, por tanto, que los de View Mountain acabaran llevando sus avances a sus propios productos.
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