El miércoles fue un día especial para todo amante de la tecnología, y especialmente de Samsung; ya que tuvo un lugar la presentación de los nuevos buques insignia del fabricante surcoreano, unos móviles que darán mucha guerra a sus competidores a lo largo del año. Bueno, mejor dicho, han venido para hacerse una vez más con la corona en Android gracias al Galaxy S23.
Puede que sea algo exagerado, pero la combinación de software y hardware es brutal, además contamos con una mejora en su cámara como nunca antes gracias al nuevo procesador Snapdragon de segunda generación, el cual no solo aporta mejoras en la fotografía móvil; sino también nos ofrece un mejor rendimiento en juegos y apps. ¿Pero es tan significativa la diferencia con Exynos?
Como ya sabréis, Samsung no solo diseña teléfonos móviles, también es un excelente desarrollador de software, es más, actualmente está creando un ecosistema magnífico para todos los usuarios. Por otra parte, también realiza un arduo trabajo de investigación en pantallas, siendo de los mejores en este ámbito; además de procesadores y componentes varios para sus productos. Realmente, ninguno cuenta con un bajo rendimiento, todos son de buena calidad y buenas opciones.
Sin embargo, en el ámbito de los procesadores Snapdragon siempre va un paso por delante, y eso Samsung lo sabe, hasta la fecha nunca han sabido como hacerle frente. Las diferencias en la gama media/baja es menor, y donde apreciamos una clara desigualdad es en la gama alta. Lo cierto es que la familia de los Galaxy S también hacían uso de los Snapdragon en ciertas regiones, siendo estos superiores a los que usaban un Exynos. En el caso de España y Europa, se utilizaba los propios de Samsung, los Exynos.
El punto de inflexión llega con los nuevos Galaxy S23, un antes y después en la manera de trabajar de Samsung, que espero se mantenga en el futuro y no se trate de un acuerdo pasajero. A partir del 10 de febrero se lanzará la familia al completo de los S23, albergando todos ellos el mejor procesador Android hasta el momento, el Snapdragon Gen 2. ¿Qué supone esto para el usuario medio? El simple hecho de portar dicho procesador mejora el uso de la batería y reduce el sobrecalentamiento de los dispositivos.
Por otra parte, si entramos en detalles técnicos, el procesamiento de fotos y vídeos es superior. Si lo unimos con los sensores de Samsung: da fruto a la mejor cámara para fotografía móvil. Ya tenemos las primeras comparaciones en apartados tan exigentes como la grabación de vídeo en 8K. No obstante, también introduce mejoras en el rendimiento y fluidez en las aplicaciones y juegos más potentes de la actualidad Android; nada se resiste al Snapdragon. Mientras que los Exynos de turno encontraba ciertas dificultades en apps realmente exigentes. ¡Ojo! Hay que aclarar que estos problemas no los experimentaban todo el mundo, solo los más quisquillosos que exprimían al máximo sus capacidades. Me incluyo en estos últimos.
Aún nos faltan datos sobre el acuerdo de Samsung junto a Snapdragon, pero todo apunta a que será la nueva elección para su gama alta en los próximos años, mientras que el resto de teléfonos continuarán alojando un Exynos; que, repito, no es una mala opción. Espero haber resuelto vuestras dudas, pero el resumen perfecto sería: Snapdragon es el rey en el ámbito de los procesadores móviles.
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